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domingo, 28 de noviembre de 2010

"No More Lonely Nights" by Paul McCartney

The verve - Sonnet (w/subs)

Cuando...








Cuando el sueño se deshace, 





Dios reconstruye;
Cuando se acaban las fuerzas,





 Dios renueva;
Cuando es inevitáble contener las lágrimas, 





Dios dá alegria;
Cuando no hay mas amor,





Dios lo hace nacer;
Cuando la maldición es verdadera, 





Dios la transforma en Bendición;
Cuando parece ser el final,





Dios dá nuevo comienzo;
Cuando la aflicción quiere persistir,





Dios  nos envuelve con la paz;
Cuando la enfermedad asola, 





Dios es quien cura;
Cuando lo imposíble se levanta, 





Dios lo vuelve posíble;
Cuando faltan las palabras, 





Dios sabe lo que queremos decir;
Cuando todo parece cerrarse,





Dios abre una nueva puerta;
Cuando dices: no lo conseguiré, 





Dios dice: no temas, pues estoy contigo;
Cuando el corazón es herido por alguién,





Dios es quien derrama el bálsamo curador;
Cuando no háy posibilidad, 





Dios hace el milagro;
Cuando sólo háy muerte ,





 Dios nos hace persistir;
Cuando la noche parece no tener fin, 





Dios hace nacer el amanecer;
Cuando caemos en un profundo abismo, 





Dios extende su mano y nos levanta;
Cuando todo es dolor, 





Dios dá el refrigério;
Cuando el calor es grande,





Dios dá la sombra de su presencia;
Cuando el invierno parece infinito,





Dios trae el verano;
Cuando no existe mas fé,





Dios dice: cree;
Cuando estamos a un paso del infierno,





Dios nos dá la dirección del cielo;
Cuando no tenemos nada,





Dios  nos dá todo;
Cuando alguién dice que no somos nada,





Dios nos dice que somos mas que
vencedores;
Cuando difícil se vuelve el caminar,





Dios nos carga en su amor.

**Luiz Carlos**





(extraido de la Red Amigos y Poemas)

sábado, 27 de noviembre de 2010

El amor y la Locura



 


El cuento fue tomado del Libro Almanaque Escuela Para Todos 2006.

Cuentan que hace muchísimos años se reunieron algunos sentimientos y algunas cualidades del hombre. Cuando el Aburrimiento bostezaba por tercera vez, la Locura propuso: vamos a jugar a las escondidas.

La Intriga se levanto extrañada, y la Curiosidad, sin poder contenerse, pregunto: ¿A las escondidas? ¿Y eso como es?

“Es un juego en donde yo me tapo la cara y comienzo a contar, desde el uno hasta un millón, mientras ustedes se esconden. Cuando termine de contar, los buscare hasta que los encuentre”, explico la Locura.

El Entusiasmo bailo de contento y la Alegría dio saltos que termino de convencer a la Duda, e incluso a la Indiferencia, a la que nunca le interesaba nada.

Pero no todos quisieron participar. 

La Verdad prefirió no esconderse. ¿Para que?, si al final siempre la hallaban.

La soberbia pensó que era un juego muy tonto. En el fondo lo que le molestaba era que la idea no había salido de ella. Y la Cobardía prefirió no arriesgarse.

La Locura rápidamente comenzó a contar.

La primera en esconderse fue la Pereza, que como siempre, se dejo caer en la primera piedra que encontró.

La Envidia se fue detrás del Triunfo, quien por su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol mas alto.

La Generosidad casi no alcanzaba a esconderse. Cada sitio le parecía maravilloso para alguno de sus amigos

El lago cristalino para la Belleza.

La hendija de un árbol era perfecto para la Timidez.

Una ráfaga de viento le parecía magnifica para la Libertad.

Por fin después de pensar primero en todos, la Generosidad termino ocultándose en un rayito de sol.

El Egoísmo, en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio. Era ventilado, cómodo, pero solo para el.

La Mentira se escondió detrás del arco iris.

Y la Pasión y el Deseo, entre los volcanes.

Cuando la Locura ya casi terminaba de contar, el Amor aun no había encontrado un sitio para esconderse, pues todo estaba ocupado.

Hasta que al fin vio un rosal y decidió esconderse entre sus flores.



“¡Un millón!”, dijo la locura. Y comenzó a buscar. La primera en aparecer fue la Pereza que estaba a solo tres pasos.

A la Pasión y el Deseo, los sintió en el vibrar de los volcanes.

En un descuido encontró la Envidia. Y claro también encontró al triunfo.

Al Egoísmo no tubo ni que buscarlo, pues el solito salio de su escondite que resulto ser un nido de avispas.

La Locura de tanto caminar sintió sed, y al acercarse al lago descubrió a la Belleza.

Encontrar a la duda fue mucho mas fácil. La encontró sentada aun sin poder decidir a donde se iba a esconder.

Así fue encontrando a todos

El Talento estaba entre la hierba fresca

La Angustia, en una oscura cueva.

La Mentira, detrás del arco iris.

Y hasta encontró el Olvido, que se había olvidado que estaba jugando a las escondidas.

Pero solo el Amor no aparecía por ningún lado.

La Locura busco detrás de cada árbol, bajo cada arroyo de la tierra, en las cimas de las montañas.
Y cuando estaba por darse por vencida, vio el rosal.

Tomo un pequeño palo y comenzó a mover las ramas. De pronto escucho un doloroso grito.

Las espinas habían herido los ojos del Amor.

La Locura no sabia que hacer para disculparse. Lloro, rogó, imploro, pidió perdón y hasta prometió acompañarlo siempre.

Desde entonces el Amor es ciego y la Locura siempre lo acompaña.

Por eso dicen que “amar es una locura, a menos de que se ame con locura”.


FIN

jueves, 25 de noviembre de 2010

Dicen que...



DICEN QUE...
Dicen que el llanto es la sonrisa del corazón,
como el quebranto un peldaño, de camino hacia la ilusión.

Dicen que no existen rosas sin espinas,
pues cada una de ellas son huellas que deja la vida.

Dicen que tras la sombra,
siempre se oculta la luz, como el rostro complaciente,
sobre el que se ve una cruz.

Dicen que el aire es el viento cuando nace,
y el ímpetu de su fuerza,
tempestad que entre sus olas yace.

Dicen que cuando la mar arrecia,
su alma se muere de pena,
mientras el sol entre risas se burla
de las gotas caídas sobre la bruma.

Dicen que unos labios muertos de sed
son peces hambrientos buscando alimentos, desde su propia red.

Dicen que boca que mucho habla, siempre provoca,
sin embargo, callada, con el pensamiento otorga.

Dicen que ojos que no ven son como el alma que no siente,
porque a veces es mejor no saber a quien se tiene.

Dicen que el silencio, es la palabra más pura
y aviva el verbo cuanto más bella y profunda.

Dicen que los besos retenidos por pudor,
son la fruta que contiene más sustancia en su sabor.

Dicen que quien se ríe de sí mismo
es capaz de hacer reír al mundo al unísono.

Gracias por tu visita

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